El presidente Donald Trump aseguró que ha llegado “el momento” de impulsar una reforma migratoria para arreglar el sistema de inmigración del país, donde se calcula que residen 11 millones de indocumentados.
Este es el momento adecuado para una ley sobre inmigración siempre que haya voluntad de hacer concesiones en ambos lados”, dijo Trump durante un almuerzo privado con periodistas, según informan varios medios locales.
Una fuente oficial de la Casa Blanca confirmó que, durante el encuentro, el presidente opinó que tanto demócratas como republicanos tienen que “suavizar sus posturas” si quieren que la reforma migratoria salga adelante.
Trump está “abierto” a tratar el tema de los jóvenes indocumentados que llegaron al país de niños, conocidos como “dreamers” (“soñadores”), y a hacerlo “por separado” del resto de los inmigrantes del país, con una “política específica” para ellos, explicó otra fuente conocedora del contenido de la reunión.
No obstante, la fuente no aclaró si el presidente está abierto a considerar una vía a la ciudadanía o a la legalización para esos jóvenes beneficiarios de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).
Según algunos medios que estuvieron presentes en la reunión, como CNN y NBC News, Trump también afirmó que estaba abierto a una vía a la legalización -aunque no a la ciudadanía- para aquellos indocumentados que no hayan cometido delitos graves o violentos.
Esa vía a la legalización permitiría a los indocumentados vivir, trabajar y pagar impuestos en Estados Unidos sin miedo a la deportación.