El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no hará pública próximamente su declaración de impuestos relativa a 2016, confirmó hoy la Casa Blanca, dos días después de que miles de personas protestaran en todo el país para exigir al mandatario que difundiera ese documento como hicieron sus predecesores.
El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, aseguró que la última declaración de impuestos de Trump, que tiene de plazo hasta mañana para entregarla al órgano fiscal del país, se encuentra bajo auditoría, igual que lo están otras declaraciones del hasta ahora magnate inmobiliario relativas a varios años.
Estamos bajo la misma auditoría que ha existido (desde hace tiempo)”, dijo Spicer durante su conferencia de prensa diaria, al confirmar que Trump no publicará la declaración una vez se cumpla mañana el plazo para entregarla.
Trump se convertirá en el primer presidente estadounidense desde Gerald Ford (1974-1977) que no publica cada año su declaración de impuestos, una tradición que sus predecesores han considerado parte de su deber de transparencia y rendición de cuentas ante el pueblo.
Durante la campaña electoral de 2016, Trump rompió también con el precedente de los candidatos presidenciales de las cuatro décadas anteriores al negarse a publicar su última declaración de impuestos, con el argumento de que estaba sujeta a una auditoría por parte del órgano fiscal estadounidense, el Servicio de Rentas Internas (IRS).