Estudiante de la Universidad del Estado de México fue secuestrado y asesinado a pesar de que su rescate fue pagado en su totalidad.
Días después de ser privado de la libertad, los delincuentes exigieron un rescate de 8 millones de pesos para no hacerle daño. Pero a pesar de que la familia cumplió con el pago acordado el joven no regresó a su domicilio, hasta que fue encontrado su cadáver el 16 de junio en el Estado de México.
Tras darse a conocer dicho caso, compañeros y amigos iniciaron una campaña a través de redes sociales para exigir justicia por el homicidio del joven universitario quién había recibido diversos premios por su labor social y desempeñó académico.
A esta campaña se unió el rector de la UAEM, Alfredo Barrera Baca, quien expresó su solidaridad con la familia del universitario y pidió a las autoridades justicia para castigar a los responsables del crimen.